EQUILIBRIO PRESUPUESTARIO
Algunos procesos de automatización son inversiones a largo plazo, mientras que otros aportan beneficios rápidos (aunque hay que seguir teniendo en cuenta los objetivos a largo plazo), y todos los ajustes deben ser graduales y supervisados con el objetivo de garantizar un centro de distribución plenamente funcional.
Un aspecto que los operadores no suelen tener en cuenta en su estudio de viabilidad es el presupuesto para modificaciones. Tanto la solución que se adopte como el funcionamiento actual afectarán a la velocidad de retorno de la inversión realizada. Un centro de distribución que invierta en automatización debe ser consciente de que los cambios son inevitables y de que hay que prever un presupuesto para futuras modificaciones, cambios y modernizaciones, incluso para el sistema mejor diseñado.
Además, al comparar modelos, los operadores deben tener en cuenta los costes de explotación. Mientras que los expertos internos pueden resolver problemas como los fallos de los clasificadores automáticos, la incorporación de más tecnología, como grandes sistemas transportadores con una red de transporte asociada, puede requerir la asistencia de mantenimiento in situ del proveedor.
APLICACIÓN CON ÉXITO
Automatización aumenta la productividad, reduce los costes, mejora la precisión del inventario, la precisión en la preparación de pedidos, el uso del espacio y de activos, el servicio al cliente y visibilidad de datos. Pero si la automatización no se integra correctamente, es posible que un centro de distribución de moda tenga que esperar más tiempo para rentabilizar sus inversiones. Cambiar y ajustar sistemas complejos es todo un reto, e implicar a los usuarios finales en el proyecto desde el principio es esencial para aplicar con éxito la mayoría de los tipos de automatización.
Los proyectos pueden resentirse por culpa de especificaciones poco claras, competencias equivocadas y pruebas inadecuadas. Los cambios y la inestabilidad de los mercados también dificultan a los operadores saber dónde invertir. También debe existir un plan para el desarrollo posterior a la implantación de la propia automatización y los métodos con los que la empresa interactúa con la automatización. Afortunadamente, se pueden tomar medidas para evitar el despilfarro de la inversión. Al trabajar con un integrador de sistemas, los centros pueden introducir mejoras en un entorno controlado y, si realizan un análisis exhaustivo de los escenarios futuros, pueden elegir mejor en qué soluciones invertir.